Powered By Blogger

martes, 12 de agosto de 2008


Educar es lo mismo que poner un motor a una barca …
hay que medir, pesar, equilibrar… y poner todo en marcha.
Pero para eso, uno tiene que llevar en el alma un poco de marino…
un poco de pirata… un poco de poeta…
Y un kilo y medio de paciencia concentrada.
Pero es consolador soñar mientras uno trabaja, que ese barco,
ese niño ira muy lejos por el agua.
Soñar que ese navio llevará nuestra carga de palabras
hacia puertos distantes,
hacia islas lejanas.
Soñar que cuando un día este durmiendo nuestra propia barca,
en barcos nuevos,
seguirá nuestra bandera enarbolada.

No hay comentarios: